La Federación de Automovilismo de Las Palmas, una vez más, tiene que contestar a las declaraciones en redes sociales de algunos miembros de la Escudería Centímetros Cúbicos, acusando a la FALP y su presidente de no autorizar el Rallye-Festival por motivos personales.
Concretamente, el Sr. Manuel Hernández González señala como “negocio federativo” la causa de que no se aprobara la celebración del evento, sin dar más datos y dejando a la especulación su afirmación. Esta persona estuvo vinculada a la gestión federativa anterior en 2019 y seguramente tendrá información al respecto que nosotros desconocemos y que ya debería estar denunciando en los juzgados.
Para rematar la confusión, mezcla los intereses de dos escuderías con la suya para intentar demostrar las influencias del presidente de la FALP, apostando más por una que por otra. Se falta a la verdad, cuando lo único que se pretende es poner en contacto a los nuevos organizadores con una entidad que ya tenía experiencia en pruebas tipo “Legends”, similar a la que pretendía organizar este año el CD. Centímetros Cúbicos.
Aunque realmente pensamos, que las intenciones del Sr. Hernández son tergiversar la actuación de la FALP al respecto. Por ejemplo, no explica por qué no se presentó la documentación pertinente y solicitada para tramitar la autorización del “motor show”, como él mismo denomina, o “evento de exhibición de vehículos históricos”, que es algo diferente a un rallye convencional, con unos requisitos de seguridad también diferentes y de obligado cumplimiento. Incluso, en la FALP tampoco nos consta que ninguna institución haya dado su autorización o permiso para su celebración.
Todo eso se omite y se carga contra el presidente de la FALP como detractor de la prueba, cuando lo único que se ha intentado es poner sentido común ante un evento no programado, además de no cumplir con los plazos ni documentos necesarios para garantizar su correcta organización y seguridad, que son claves para el éxito de todo tipo de actividades lúdico-deportivas.
La FALP siente mucho que se toque la sensibilidad de la pasión que todos tenemos por el automovilismo deportivo, para enmascarar la nefasta gestión de este evento desde sus inicios, evadiendo responsabilidades y acusando a nuestra federación como si fuera la culpable, cuando son sus propios promotores los que se han labrado la no autorización.
Miguel Angel Domínguez
Presidente de la FALP